viernes, 6 de mayo de 2011

Anillamiento de Halcones en Peñaranda

Tuve la fortuna de presenciar recientemente los trabajos de anillamiento de veterinarios, biólogos, guardería forestal y Seprona en torno a un nido que ocupa desde hace años una pareja de Halcones en un Silo perteneciente a la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Casilla y León.
Aquí se muestran algunas imágenes de este año y otras de archivo de otras actuaciones.
La presencia de Halcón peregrino en la provincia de Salamanca es escasa y además sufre con demasiada frecuencia expolios por parte de cetreros desaprensivos, pese al insistente trabajo que llevan a cabo los miembros de la Guardia Civil (Seprona) en colaboración con entidades como la Sociedad Española de Ornitología y su grupo local SEO Salamanca.
El nido que nos ocupa en esta ocasión se localiza en un silo propiedad de la Consejería de Agricultura y Ganadería en la provincia de Salamanca y os mostramos imágenes tanto de su área de campeo o territorio, así como del interior del nido y las labores de anillamiento.






















© Francisco M. Martín -  Imágenes Naturales

Las imágenes han sido realizadas con cámaras Canon Eos 5d Mark II, Eos 40d, Nikon D300s y objetivos que van desde el 16-35mm f2,8 II hasta el 500mm f4 L IS
Para adquirir estas y otras imágenes puedes contactar con el autor a través del mail
fmartinfoto@gmail.com


miércoles, 4 de mayo de 2011

Estepas castellanas

La primavera es una época nerviosa. Por todas partes surgen motivos y oportunidades fotográficos y no sabes a que atender, al paisaje o la fauna. Al final siempre te queda la sensación agridulce de no haber aprovechado al máximo esta estación tan fructífera y con el paso de los años disminuye la sensación de que vendrá otra primavera en la que resarcirse,
Después de nuestro encuentro con el oso cantábrico nos hemos centrado además de en varios encargos fotográficos, en la búsqueda de la horizontalidad. Después de las montañas cantábricas apetece un poco de estepa, máxime cuando las llanuras tienen su apogeo en estos meses.
Si conseguimos que de sus frutos, el trabajo de campo que llevamos realizando nos permitirá realizar nuevas imágenes de otras especies no menos atractivas que las conocidas avutardas, pero .... tiempo al tiempo.
También durante esta época hemos tenido la oportunidad de probar de nuevo un objetivo de Nikon, el zoom  AFS VR 200-400 f4 que sin alcanzar la calidad del 500 is f4 de Canon nos permite una gran flexibilidad y nos sirve para adaptarnos a esta lente que en breve estará disponible en la marca Canon. Unido a este objetivo estamos  probando la D7000 de la que en unas semanas tendremos una opinión más firme que se podrá traducir en una pequeña reseña dentro de este blog.
Por ahora aquí os mostramos imágenes realizadas con la Nikon D7000 y el zoom mencionado algunas de ellas a sensibilidades de 3600ISO como es el caso concreto de las perdices y que son todavía perfectamente publicables pese la elevada sensibilidad usada en un sensor de formato recortado.























Imágenes tomadas con cámara Nikon D7000 y zoom Nikon AFS VR 200-400 f4. Trípode Gitzo 1531 y rótula de Wimberley

Para adquirir estas y otras imágenes a cualquier tamaño puede contactar conmigo a través del mail fmartinfoto@gmail.com


domingo, 27 de marzo de 2011

Nuevas tomas de Oso pardo cantábrico

Con la inquietud en el cuerpo durante toda la semana finalmente el viernes de nuevo nos encaminamos hacia el encuentro con nuestra osa y su familia. Las noticias durante la semana eran de nieve en los valles de León y frío en las cumbres. Para el fin de semana prometía también lluvia en la cordillera y así ha sido pero aún con todo no podíamos resistirnos a intentar un nuevo encuentro con esta familia de osos salvajes. En esta ocasión ha sido más emocionante si cabe pues hemos visto aunque no fotografiado con la calidad deseada escenas impresionantes de lactancia materna.
Las bajas temperaturas llevaron a nuestra familia por un periplo desde las cumbres hasta media ladera, casi casi fondo de valle. Durante el día ha visitado zonas medias en busca de comida entre las mimbreras y espinos pero por la tarde y tras sufrir, la familia de osos y nosotros, una intensa lluvia, se encaminaron hacia arriba. Toda la noche estuvo lloviendo y nevando en el valle por lo que pensabamos que podía haber bajado de noche en busca de cobijo y mejor temperatura, pero esta mañana nos ha sorprendido, pues la hemos avistado con el telescopio durmiendo plácidamente con toda su familia frente al precipicio rocoso y bajo una enorme escoba, rodeada de una tímida nevada, que más arriba ya cubría por completo las cimas. Así la hemos dejado hasta las doce de la mañana más o menos, lo que contradice los datos que teníamos de osos activos con las primeras luces y dormitando a mediodía. 

En esta imagen la madre estaba vigilando a los oseznos que ya se muestran
bastante  independientes aunque acuden de vez en 
cuando a solicitar la lactancia a la madre.

Aquí podemos ver uno de los oseznos alimentándose de los brotes tiernos
de un salix sp.  Debajo la familia recogía las ramas rotas

De nuevo una imagen de la osa atenta a su cachorros

La hembra alimentándose de hiedra



Imágenes familiares





Estas tres últimas imágenes están tomadas bajo una lluvia intensísima.
En la segunda se puede ver a la osa intentando sacudirse el agua que la
empapaba mientras los cachorros ya se habían refugiado bajo las escobas.



Imágenes tomadas con cámara Canon Eos 1d Mark IV, objetivo EF 500mm f4 L IS y teleconvertidor 1,4x en venta. Trípode Gitzo 1531 y rótula de bola RRS BH-55

Para adquirir estas y otras imágenes a cualquier tamaño puede contactar conmigo a través del mail fmartinfoto@gmail.com

© Francisco M. Martín -  Imágenes Naturales

lunes, 21 de marzo de 2011

Oso pardo en la Cordillera Cantábrica

Desde que era pequeño soñaba con los osos, veía los mapas catastrales de los Picos de Europa como un territorio inexplorado en el que cualquiera que anduviera por él se podía topar con un oso cantábrico. Evidentemente no podía salir a explorar ese vasto territorio pues carecía de dinero y de permiso paterno.
Ya de adolescente me acerqué en varias ocasiones a la cordillera sin conseguir avistamientos. Mi primer encuentro con el plantígrado fue en la comarca de Riaño, durante un campamento juvenil en  torno a 1976. El emplazamiento del campamento se eligió en el tristemente inundado valle de Riaño antaño lleno de vida pastoril y salvaje. Recuerdo las aguas limpias del río Esla en las que nos bañábamos y la pureza del entorno.  Recuerdo las casonas del valle, en especial las de la población de Riaño. Hermosas y robustas construcciones con siglos de historia que se vinieron abajo, con los sueños de mucha gente, en poco tiempo.  En pocos años la riqueza del valle quedó mermada y el Nuevo Riaño con sus edificios de ladrillo y casas modernas es una triste ciudad que no encuentra la personalidad propia de los valles ganaderos de León, que le robaron.
Antes de la destrucción de Riaño tuve la fortuna de sentir la presencia del oso en uno de los valles tributarios del Esla. El roce de la vegetación y bramido terrible que atronó en la montaña son todavía para mi motivo de escalofrío. Nunca vimos al oso pero sentimos como nunca su presencia de la que huimos corriendo ladera abajo en dirección a la seguridad del valle.
Más tarde centrado en otros menesteres me alejé de la Cordillera Cantábrica hasta que establecido como freelance, siempre que podía, me acercaba a estas montañas de gente entrañable y pueblos únicos. Sin embargo, las obligaciones de encargos y el frenesí de la vida en la ciudad no facilitaron más encuentros con los osos.
No ha sido hasta el 2006 que tuve la fortuna de compartir, gracias al empuje de mis amigos pues fue una época compleja para mi, una de las visiones más inolvidables de mi existencia. Frente a nosotros, aunque a gran distancia, una osa se encaminaba hacia el encame con sus cachorros entre el monte de escobas y brezos de Somiedo.
Desde esta visión solo fotografiada mediante digiscoping se han sucedido otras muchas en León y Asturias pero no ha sido hasta este año que he tenido la fortuna de poder disfrutar de una familia de tres oseznos con su madre a una distancia suficientemente cercana como para poder sacar fotos con el 500 mm y el convertidor 1,4x.
Aquí os muestro algunas de las tomas realizadas en un pequeño valle de la provincia de León de oso pardo en estado salvaje.













© Francisco M. Martín
Para la adquisición de estas y otras imágenes así como encargos fotográficos contactar al mail


Todas las tomas realizadas con Canon EOS 1d Mark IV, objetivo 500mm f4 L IS y teleconvertidor 1,4x (el teleconvertidor está en venta)

Por fin toqué a la zorra

Aquel día marcó un antes y un después en mi vida personal. Me encaminaba como cada jornada a mi destino fotográfico pensando en nuevas toma...