martes, 22 de febrero de 2011

Compra de trípode

Antonio finalmente ha comprado un trípode Manfrotto de carbono, el modelo 055CX pro 4.
Una buena elección sin duda. Mucha suerte y no olvides llevarlo al campo que es fundamental.

domingo, 20 de febrero de 2011

Después de la cámara....... el trípode

Rinocerontes negros acudiendo al bebedero al anochecer. Etosha National Park. Nambia
Canon Eos 5dII y Canon EF 100-400 f4,5-5,6 L IS
Trípode Gitzo Mountanieer 1227 y rótula de bola Markins Q20

Durante los últimos días he charlado varias veces con un compañero fotógrafo acerca del uso y elección del trípode pues está pensando en comprar uno y me ha pedido mi opinión.
Voy a exponer en el blog las pequeñas reflexiones a que hemos llegado.
 Después de las lentes y la cámara considero que un buen trípode es la última pieza necesaria para conseguir buenas fotografías o al menos para no tener que echar la culpa a la falta de medios técnicos como la causante de los malos resultados.
Este artilugio es uno de los más odiados debido a su peso y volumen, más ahora que tenemos lentes y cámaras con estabilizador incorporado. Pero el hecho de que dispongamos de medios técnicos para evitar la trepidación no quiere decir que no tengamos la necesidad de un buen trípode.
De hecho el cada vez más generalizado uso del trípode consiguió una mejora sustancial en la calidad de la fotografía. Si renegamos de su uso estaremos limitando nuestro horario fotográfico a aquellos momentos del día en que la luz es elevada, que suelen coincidir con el mediodía cuando las fotos quedan peor. El trípode nos permite aumentar al 100 por 100 el horario de nuestra fotografía, reducir el ruido digital al disminuir el iso elegido y además nos permite poner en práctica una gran cantidad de técnicas fotográficas que de otra forma serían imposibles. Por ejemplo el HDR, los timelapses, la fotografía macro de calidad, conseguir efectos de movimiento en agua, vegetación, sujetos que se desplazan y  en días nublados, para conseguir la máxima profundidad de campo sin aumentar el ISO y por lo tanto manteniendo al máximo la calidad de los resultados con nuestro sensor digital....

San Saturio y río Duero en Soria al anochecer
Canon Eos 5d y Canon EF 24-105 f4 L IS
Trípode Gitzo Mountanieer 1227 y rótula de bola Markins Q20

Muchas veces sin embargo, renunciamos a su uso por la comodidad de disparar a mano y con el estabilizador. Nos llegamos a decir que tenemos buen pulso, que el estabilizador hará el trabajo del trípode.... pero si comparamos dos imágenes realizadas una con trípode y otra sin él, podremos observar en la segunda ligeras trepidaciones y pérdida de calidad  que sólo será notable a grandes ampliaciones, no para uso en la web, pero esta reducción en la nitidez  equivale a trabajar con cámaras que tuvieran menos megapíxeles  de los que realmente tienen ya que no podremos someter nuestras fotos a grandes ampliaciones o quizá ejecutar algún recorte para enderezar la imagen o mejorar el encuadre.

Con el uso de teleobjetivos por otra parte es impensable, salvo raras ocasiones, trabajar sin trípode y de hecho existen gran cantidad de accesorios específicos adecuados para que nuestro teleobjetivo descanse sobre el trípode. El peso de los teleobjetivos y su poder de ampliación  los hacen candidatos excelentes al uso del trípode pues aunque podemos soportar durante parte de una sesión el uso del teleobjetivo a mano acabaremos mucho más cansados y por ende con peores resultados que si nos hubiéramos desplazado con el trípode.
Por otra parte el trípode aporta una singular característica a la fotografía que es el hecho de hacernos reflexionar más aún si cabe, sobre la composición, con lo que nos permite mejorar nuestras tomas o al menos tener clara la elección del lugar, altura, encuadre...., pues ubicar la cámara y el trípode lleva cierto tiempo.


Paso de Despeñaperros. Jaén
Canon Eos 40d y Canon EF 70-200 f4 L IS
Trípode Gitzo Mountanieer 1227 y rótula de bola Arca Swiss B1

A la hora de enfrentarnos a que trípode comprar debemos sopesar qué necesitamos y las características básicas de un buen trípode entre ellas la primera es la estabilidad, que antes estaba relacionada íntimamente con el peso. Sin embargo con la introducción de trípodes de carbono y basalto el peso ha dejado de ser el problema de los trípodes pasando a ser el volumen durante su transporte, algo inevitable si queremos disparar nuestra cámara con cierta flexibilidad.
El trípode tiene por misión reducir las vibraciones, tanto las climatológicas como las producidas durante la realización de la fotografía por nosotros y por la cámara, además de permitirnos nuevos horizontes creativos tal y como he comentado más arriba. Estas vibraciones pueden ser absorbidas por el propio trípode si la velocidad de obturación elegida es un poco elevada o podemos ayudar a reducirlas por medio del levantamiento de espejo y el uso de un cable disparador. Estos dos mecanismos son fundamentales en la disciplina de fotografía de paisaje si queremos usar diafragmas cerrados e ISOs bajos.
Para reducir las vibraciones producidas por el viento no nos quedará más remedio que añadir más peso, si podemos, al trípode. Para ello los trípodes profesionales cuentan con un pequeño gancho debajo de la columna o zona central entre las tres patas de donde podemos colgar diversos bultos, principalmente nuestra misma mochila fotográfica.


Aerogeneradores en La Muela. Zaragoza
Canon Eos 5d y Canon EF 24-105 f4 L IS
Tripode Gitzo 1531 y rótula de bola BH-55 RRS

En su afán por reducir el tamaño de los trípodes cuando están plegados los fabricantes los hacen con patas en las que se integran hasta cinco secciones. Esto hace que plegados apenas ocupen pero cuando estamos fotografiando puede ser necesario, dado el pequeño tamaño de las patas, desplegar la totalidad de la longitud por lo que estaremos perdiendo estabilidad pues descansamos todo el peso de nuestro equipo en una patas con una sección de diámetro muy reducida.
Una buena solución de compromiso son los trípodes de 3 secciones y si disponemos o elegimos comprar uno con más secciones hemos de intentar usarlo sólo en casos extremos con la totalidad de la longitud de las patas desplegada.
Otras características de los trípodes profesionales y que han pasado a ser una necesidad en la fotografía de naturaleza es que las patas sean independientes, no estén conectadas entre si, y que tengan un amplio rango de movimientos para adaptarse a las irregularidades del terreno.
Esta amplitud de movimientos facilita tanto colocarlo en laderas escarpadas como hacer macro con cierta comodidad al conseguir bajar el trípode a una altura muy cercana al nivel del suelo. Una solución es invertir la columna central con lo que también la cámara se coloca boca abajo, una situación compleja para maniobrar y que puede provocar sombras sobre el sujeto a fotografiar. Otros trípodes disponen de un columna que puede ser articulada de forma horizontal pero esto reduce la estabilidad del conjunto cuando trabajamos con teleobjetivos.
Otros modelos de trípode carecen de columna central descansando el cabezal, del que hablaremos en otra entrada de este blog, directamente sobre la unión de las tres patas. Esta opción añade estabilidad pero hace a las patas más difíciles de manejar especialmente en trípodes donde las patas se articulan ampliamente. Puede ocurrir que al plegar el trípode se giren las patas hacia el interior dificultando el manejo del aparato.

Panorámica de Jaén con su Castillo al fondo.
Canon Eos 5d y Canon EF 70-200 f4 L IS
Tripode Gitzo 1531 y rótula de bola BH-55 RRS

Entre las marcas más conocidas de fabricantes de trípodes encontramos a Gitzo, Manfrotto, Cullman, Giotto, Really Right Stuff, Slik, Benbo, Benro, Bilora o Velbon pero sin duda son Gitzo y Manfrotto los más vendidos y los de mejor calidad con la irrupción de los americanos RRS de gran calidad y elevado precio.
Gitzo y Manfrotto pertenecen al mismo grupo empresarial pero con dos líneas de producción marcadamente distintas siendo Gitzo el que alcanza mayores niveles de calidad, resistencia, peso reducción y fiabilidad de resultados fotográficos. Esto no quiere decir que Manfrotto sea malo, simplemente es una segunda línea de producción. Hasta hace poco eran dos empresas pero tras la fusión de ambas mantienen su producción de forma casi independiente. Otros trípodes construidos en madera prácticamente están reducidos al mercado americano y para usos muy específicos aunque también pueden utilizarse para la fotografía.
Gitzo y Manfrotto son marcas europeas, la primera francesa y la última italiana. Manfrotto conocido también como Bogen, especialmente en el mercado americano, goza de una amplia gama de productos y soluciones prácticamente para cualquier necesidad (hasta fotografía publicitaria y de interiores) estando Gitzo más centrado en aparatos para uso en exteriores.
De la gama manfrotto hay que destacar como los mejores el 055 en sus versiones de carbono y aluminio este ultimo con un peso que supera los 2kgr por lo que sólo es aptos para pequeños transportes. También su hermano pequeño el 190. Los modelos se dividen también entre patas con tres y cuatro secciones y columnas que facilitan la colocación horizontal o aquellas que sólo se utilizan de forma vertical a las que también se le puede conectar la cámara de forma invertida, tal y como ya he comentado.

Rincón Nocturno en Ubeda. Jaén.
Canon Eos 5d y Canon 24mm TSE f3,5 L
Tripode Gitzo 1531 y rótula de bola BH-55 RRS

De los trípodes Gitzo hay una variedad mucho mayor y es fácil perderse entre tanta característica.
Para empezar hay que entender la filosofía de cada serie. Entre las más interesantes para uso en naturaleza se encuentran la Mountanieer, Traveler, Basalt, Explorer y Systematic. Mountanieer es la serie clásica o más antigua pero que se sigue actualizando. Construida en carbono cuenta con columna central a diferencia de la Systematic en la que se incluyen los trípodes más resistentes y estables entre los fabricados por Gitzo. Dentro de la gama Traveler podemos encontrar trípodes muy ligeros y con dimensiones contenidas, perfectos para desplazamientos en avión o por el mismo monte cargando la mochila. Para reducir su tamaño se puede colocar la cabeza entre las patas con lo que el trípode plegado se acorta otros 8 o 10 centímetros, siempre hablando de cabezas de diámetro adecuado o de las que fabrica Gitzo. Lamentablemente este fabricante no hace casi cabezales para el estándar de platos Arca tan usado en fotografía. Explorer es la gama de Gitzo preparada para trabajos macro o en condiciones más complicadas gracias a la posibilidad de colocar la columna central descentrada del eje vertical del trípode y finalmente encontramos los de aluminio  y basalto cada uno con características extremas. Los primeros más pesados pero más baratos y los de basalto que se caracterizan por su resistencia y ligereza pero con un coste económico algo más elevado.

Paorámica Nocturna de Sobradillo. Salamanca
Canon Eos 5d y Canon EF 100-400 f4,5-5,6 L IS
Trípode Gitzo Mountanieer 1227 y rótula de bola Arca Swiss B1

A la hora de comprar un trípode hemos de diferenciar el uso que le vamos a dar. Si mayoritariamente vamos a utilizarlo con un teleobjetivo nos tenemos que ir como mínimo a la serie 3 y superiores de los sistematic, por ejemplo 3531 pero si buscamos algo ligero que nos permita desplazarnos por terrenos escarpados, quizá los mejores son los Traveler y entre ellos el 1541T.
Una solución de compromiso entre libertad de movimientos y fiabilidad es el Mountaineer GT2542L con un peso muy contenido y que admite combinación de cámara y teleobjetivo hasta 300mm y probablemente aceptará con mayor riesgo de trepidación una combinación con el 500mm pesando sólo un kilo cuatrocientos treinta gramos.
Finalmente no conviene olvidar que para usar un trípode hay que seguir unas normas básicas. La primera tener claro lo que vamos a fotografiar ya que el manejo de trípode es laborioso y más en el campo en situaciones de frío o cuando está sujeto a la mochila de fotografía.
Como segunda norma básica hay que insistir en la colocación de las patas dejando espacio para estar nosotros próximos a la cámara, para ello hay que situar una de las patas hacia el sujeto que vamos a fotografiar.

Jirafas acudiendo a bebedero en Etosha National Park. Namibia.
Canon Eos 5dII y Canon EF 100-400 f4,5-5,6 L IS
Trípode Gitzo Mountanieer 1227 y rótula de bola Markins Q20

En el caso de los trípodes con columna estos deben estar bien nivelados pues ya de por si la columna levantada disminuye la estabilidad del trípode y más aún si esta se encuentra ligeramente inclinada. No sería la primera vez que se me cae la cámara con el trípode en momentos de mucho viento. Afortunadamente lo que se dañó fue el filtro polarizador y otras veces cayó en la misma playa afortunadamente.
Hay que evitar usar la columna central y si la usamos, podemos colgar algo pesado debajo de esta pero que no se balanceé con el viento, para añadir estabilidad al conjunto.
Si es posible hay que trabajar con la menor cantidad de altura posible para aumentar la estabilidad y poder trabajar más rápido ya que es verdaderamente engorroso ir con un compañero que abre las patas del trípode hace una foto, las cierra y al poco rato vuelve a repetir la operación. Si abrimos las patas hasta la altura necesaria no sólo conseguiremos estabilidad sino también rapidez de manejo. Por supuesto usar la patas más gruesas y no las del extremo inferior que son menos estables.
Otra opción poco aconsejable es llevar la cámara montada en el trípode y desplazarnos por el monte así. Con esto sólo podemos conseguir aumentar la suciedad del ocular y hasta del sensor cuando no rozar los objetivos y la misma cámara o que se nos pueda aflojar del cabezal y caerse.
No debemos olvidar que el trípode no va a eliminar las vibraciones que generemos con nuestro dedo al disparar. Es necesario, especialmente con velocidades lentas, levantar previamente el espejo y utilizar un cable disparador o como poco el temporizador de la cámara.
Si nuestro objetivo tiene estabilizador comprobar si es compatible con el uso de trípode aunque en todo caso no será necesario el estabilizador si utilizamos el trípode y un cable disparador.


© Francisco M. Martín - Imágenes Naturales





lunes, 14 de febrero de 2011

Nueva dirección del blog

Ya se puede acceder a este blog desde la dirección más sencilla www.imagenesnaturales.es que representa el verdadero nombre del blog.
Aunque sigue alojado en blogger hemos adquirido el dominio imagenesnaturales.es  para mayor facilidad de acceso sin tener que recordar la dirección de blogger.
Ambas dirección son compatibles y se mantendrán operativas.
¡A todos, gracias por seguir este blog, estamos abiertos a todas vuestras sugerencias!

martes, 8 de febrero de 2011

Ascensión Invernal a la Peña de Francia

Las últimas nevadas dejaron en Salamanca un oportunidad única para iniciar la ascensión hasta la cima de esta mítica montaña. Aquí os mostramos unas imágenes de esta marcha a la Peña de Francia iniciada desde El Cabaco por el ramal del camino de Gran Recorrido que atraviesa el Sistema Central. 























Las carreteras han permanecido cortadas durante una semana y en su cumbre no había huella humana que la hubiera pisado desde la nevada ocurrida unos días antes.  Una experiencia digna de recordar.


Canon Eos 5d Mark II, Canon EF 24-105mm f4 L IS, Canon EF 16-35mm f2,8 y Canon 100-400 f4,5-5,6 L IS


© Francisco M. Martín

lunes, 7 de febrero de 2011

Nuevas lentes Canon, el EF 200-400mm f/4L IS USM


Aunque aún no está colgado en la web de Canon USA, entre las nuevas incorporaciones se encuentra el desarrollo de un 200-400 mm f4 L IS que es una novedad para la línea de objetivos de la marca. Este zoom, largamente deseado por los usuarios de Canon y presente desde hace años entre las lentes Nikon, se reserva la baza de incluir un teleconvertidor de 1,4x integrado con lo que se elimina el polvo durante la instalación del mismo y se añade rapidez a la operación. Esta es una práctica habitual en lentes de cinematografía que cuenta con la ventaja añadida de que está diseñado específicamente para estas distancias focales.
Un objetivo de ensueño para ciertos usos en los que se exige un cambio constante de focal como bebederos, comederos y carroñadas o grupos de aves y mamíferos. 
Podéis acceder a información en la página de Canon Profesional


Canon Eos 200-400 f4 L IS

También Canon ha anunciado hoy las esperadas versiones renovadas del 500 f4 IS L y el 600 f4 IS L que vienen con importantes mejoras, entre ellas la reducción en su peso algo también deseado por los usuarios de estos objetivos que nos vemos obligados a cargar estas lentes entre ambientes difíciles. En el caso del 600 f4 la reducción es de aproximadamente 1,4 Kgr. y en el 500mm f4 68o gramos que significa aproximadamente un 20% de reducción.
La calidad óptica ha sido nuevamente mejorada pese a que era francamente difícil conseguir más calidad. Otra funcionalidad actualizada es el estabilizador con cuatro pasos y adaptado a vídeo y uso de trípode.



Se avecina una año de inversiones en lentes. 
Sólo queda que Canon se decida finalmente a mejorar la calidad de procesamiento de los sensores de sus cámaras para reducir el ruido a ISOs  altos  manteniendo los megapíxeles actuales de la gama  y que afine aún más su autofoco.
Aquí van los enlaces a la web de Canon USA
Ef 500mm f4 L IS II USM
Ef_600mm f4 L IS II USM

© Francisco Martín Martín

martes, 1 de febrero de 2011

Huyendo del frío

Huyendo hacia el sur, del frio que ha aterrizado por nuestras tierras, nos acercamos hasta Málaga y la conocida Sierra de las Nieves que haciendo honor a su nombre no pudo recibirnos de mejor forma que con la tremenda nevada que había caído la noche anterior. Un excursión breve pero intensa entre pinsapos y árboles muchas veces centenarios. Sin duda una visita recomendable en está fechas invernizas.







Más tarde subimos hacia Sierra Morena en busca del gran gato, pero eso ya es una historia para otra entrada futura.
© Francisco M. Martín.

Todas las fotos Canon G12

lunes, 10 de enero de 2011

Consumo fotográfico, o comprar, tirar, comprar... otra cámara.

Permitamos que la naturaleza se asocie con nosotros, como estos líquenes en la señal de tráfico, para reconducir el modelo económico hacia otro más respetuoso y con menos huella ecológica.
Paremos de una vez por todas este modelo de desarrollo que nos lleva cada pocos años a crisis profundas que sólo se arreglan aumentando la brecha entre los ricos y los pobres.
¡Otro modelo es posible!
Canon Eos 5dII, EF 24-105mm. f4 L IS


No me resisto a poner el enlace del documental que transmitió ayer por la noche La 2.


Como occidental que soy, tengo asumido mi concepto de depredador pero no me siento cómodo con tal papel. Cada gesto de compra, cada hábito de consumo lo medito en profundidad para saber en mi interior si la compra realmente cumple mis expectativas o está más bien dirigida por la publicidad o el engaño y manipulación de los fabricantes. A ello contribuye mi pasado activista en diversas asociaciones ecologistas y en Los Verdes. Aunque en la actualidad no milito en ninguna asociación sigo firme en mis convicciones por lo que para mí fue un verdadero placer disfrutar con el descubrimiento de este documental que me ha recordado que no estoy solo. Hay un grupo numeroso de gente por todo el planeta con la que comparto importantes planteamientos vitales.
Ayer tuve la fortuna de toparme con esta joya de documental (ajeno a la fotografía de naturaleza) que a la vez que enciende en nuestra mente una intensa duda sobre hacia donde vamos, también abre la vía para comprender que no estamos solos en el camino de cambiar el modelo económico y social que impera en la actualidad en este mundo.
Tras ver el documental no puedo quitarme de la cabeza la importancia de las más pequeñas decisiones cotidianas que, aunque ya era consciente de su trascendencia, ahora se  hace más patente esta revelación por el impacto que tiene el consumo en el planeta, esta preocupación por cada acto de consumo, por cada desplazamiento, por cada inversión, por cada imagen.
Como fotógrafo he vivido varias revoluciones -vamos a llamarlas así- o cambios trascendentales que han motivado importantes consumos: el paso del foco manual al autofoco, la fotografía digital y ahora la carrera de los megapíxeles, los objetivos estabilizados.  Todos estos nuevos inventos han motivado que muchos de nosotros de inmediato desecharamos los estupendos objetivos o cámaras que teníamos anhelando los nuevos productos.

Okavango, Botswana
Canon EOS 7d, EF 100-400mm f4,5-5,6 L IS
Como consumidores debemos meditar si los avances que nos ofrecen los fabricantes realmente merecen el esfuerzo de compra y algo más importante aún, el impacto para el planeta que esta nueva compra genera y no vale la respuesta de que el objetivo ya está en los estantes de la tienda.
Seamos conscientes de que las fotos las hacemos nosotros y no las cámaras. Jamás en la vida hemos gozado de herramientas tan fabulosas para conseguir nuestras imágenes, no nos dejemos engañar por la publicidad y antes de comprar meditemos si realmente hemos sacado todo el provecho a la cámara o al objetivo que tenemos. ¡Ah... y no abandonemos nuestra vieja cámara porque la nueva tiene un diseño más atractivo y elegante!

Tenemos una responsabilidad enorme hacia nuestros congéneres de otros continentes que aún viven como hace siglos.
Imagen de indígenas Himba habitando en las estepas de Namibia a decenas de kilómetros de la civilización y sin medio de transporte que les conduzca a la ciudad más cercana.
Canon EOS 5dII, EF 24-105mm. f4 L IS

© Francisco M. Martin - Imágenes Naturales

miércoles, 5 de enero de 2011

Buitres y cámaras, una experiencia única

Durante la primavera del año pasado tuve la oportunidad de participar en varias carroñadas. Algunas sin éxito pero otras tremendamente productivas.
Gracias a la colaboración de la gente del campo localizamos emplazamientos adecuados para alimentar buitres y preparamos el escenario para cuando se produjera la ocasión de contar con la materia prima: un cadáver lo suficientemente atractivo para atraer a buitres leonados y negros.


El emplazamiento elegido en esta ocasión, en zona de dehesas, limita la aparición de otras aves carroñeras como el alimoche o incluso el águila real, que puede acudir a este tipo de alimentos, pero facilita la aparición de milanos, córvidos, etc.
Cada carroñada es una experiencia única e irrepetible por la magia de la concentración de un grupo de animales que interactúan en condiciones de supervivencia que recuerdan a lo que ocurre aún hoy en día en África. La pelea por los recursos alimenticios es un momento único para gozar de estas especies y por supuesto fotografiarlas.



El cúmulo de individuos y el tremendo dinamismo del momento hacen que algo que parece fácil es en realidad francamente difícil. Los encuadres, mediciones de luz, estar atento a cada pelea o a las más importantes,.... son los retos de este tipo de fotografía. Además hay que añadir que los buitres son poco madrugadores y tardan en llegar con lo que ya estamos cansados cuando llegan y más de una vez nuestro cerebro nos ha dado la orden de tirar la toalla y volver a casa. 



Pese a ello aguantamos y al final la naturaleza nos recompensa con una hora o más en compañía de estas grandes aves rapaces.
Nunca he tenido la fortuna de conseguir imágenes de carroñadas con el sol naciente por lo que muchas de las imágenes se desperdician por las condiciones de luz tan duras que se dan a mediodía. La instalación del emplazamiento es fundamental para conseguir las tomas con las mejores condiciones de luz posibles.




Respecto de las lentes es a la vez lo más fácil y lo más difícil. Un grupo de buitres desesperados por comer no reparará en nuestro hide si este ha sido montado aprovechando algún tronco de árbol o la sombra de una roca o arbusto. Por este motivo podemos tenerlos relativamente cerca lo que unido a su tamaño, permite que no necesitemos invertir en un teleobjetivo potente. La luz de mediodía favorece también que el objetivo no sea especialmente luminoso, pero el verdadero problema es la gran cantidad de tomas o momentos fotográficos con los que nos vamos a encontrar. Desde primeros planos y detalles a tomas de grupo e individuos en vuelo y otros aislados. Lo ideal entonces es un zoom del orden del 100-400 mm de Canon o 80-400 mm de Nikon. Las lentes estabilizadas pueden ser necesarias en algún momento pero no imprescindibles ya que dependeremos totalmente de nuestro trípode. Uno sólido y seguro y si es posible con rótula tipo Wimberley es la mejor opción para nuestro trabajo. En su defecto una rótula de bola será suficiente pero nos obligará a mantener nuestros brazos en tensión constante con el consiguiente cansancio.




Las fotos que aquí os muestro forman parte de un periodo de prueba en el que disfruté usando una cámara Nikon D300s. Soy usuario habitual de Canon desde que abandoné y vendí mi querida Nikon F5 a causa de las lentes estabilizadas y la aparición del 100-400 mm de Canon.
En la actualidad los tiempos han cambiado mucho y Nikon cuenta con un arsenal de lentes estabilizadas y aunque su 80-400 mm. no tiene motor y es peor ópticamente que el 100-400 de Canon, Nikon cuenta con la joya, en mi opinión, del 200-400 mm. VR f4. Desconozco por qué Canon no fabrica este objetivo pero sería un superventas como lo es en el ámbito de los usuarios de Nikon.





Este objetivo, que es el usé para estas imágenes, y la D300s son una combinación excepcional para un fotógrafo de naturaleza. Quedé francamente impresionado con el autofoco, del que Canon tiene mucho que aprender a día de hoy. Ni siquiera la EOS 1D Mark IV llega la nivel de la D300s, la cuarta hasta ahora en el ranking de las cámaras de Nikon. Por supuesto, la Nikon D3s que también probé, gracias a mi compañero y amigo Gaspar Domínguez, es aún mejor que la D300s.





Lo que no me gustó de Nikon es la interpretación del color que hace y la falta de software gratuito de calidad. Es verdad que se puede probar el Capture NX, ahora en la versión 2.2.6 pero, a diferencia de Nikon, Canon ofrece con sus cámaras el estupendo Digital Photo Profesional que poco a poco ha ido aportando mejoras y hoy en día lo considero como el mejor procesador de imágenes para las tomas realizadas con cámaras Canon.
Con Nikon podemos probar por supuesto, además del Capture NX, Adobe Photoshop en versión CS4 o CS5, Aperture si usamos ordenadores Apple, Adobe Lightroom, Capture One Pro 6 o Dxo, entre otros.




Lo carísimo del software dificulta tomar decisiones pero tras lo que he probado y usado y lo que he visto en la red me decanto para Nikon por el Capture One que consigue una tremenda calidad de las imágenes NEF Nikon, aunque con un trabajo más complejo que lo que podemos realizar con el DPP de Canon. Algo obvio y que todos conocemos es que el DPP o el Capture NX sólo procesan y visualizan las imágenes de su propia marca por lo que si usamos varias marcas de cámaras tenemos el problema de acceder a un software común a ambas o tenemos que instalar los software que facilita o vende cada fabricante.





Estas casas independientes de software pueden procesar cualquier marca y modelo de cámara con las debidas y periódicas actualizaciones.
El software de Nikon es lento (yo he probado la versión 2.2.4) , con una curva de aprendizaje muy grande y complejo de manejar, lo que hace que solo se recurra a él para conseguir determinados resultados que los otros programas no consiguen.






Volviendo a las cámaras, Nikon ha hecho sus deberes y aunque tiene un gran vacío entre los 12 y los 24 mpx que en la actualidad ha empezado a ocupar con cámaras del rango aficionado (D3100 y D7000) pero no en profesionales, es ahora mismo la mejor opción pues la marca japonesa fabrica cámaras de gran calidad y resistencia. Sus puntos fuertes son el sensor y la calidad de su autofoco, además de la calidad mecánica y las facilidades que incluye en las cámaras como el nivel electrónico (ahora Canon también lo incorpora) o su conexión, previo pago, a un gps para georeferenciar las tomas realizadas de forma automática.





A Nikon, sin embargo, le faltan objetivos estabilizados como el 300 mm f4, o con motor como el mencionado 80-400 mm o un 400mm f5,6, del que Canon cuenta pero hace años que no actualiza al no tener competencia. Pero Nikon es puntero en cuanto a lentes gran angulares y sobre todo por la calidad de los sensores que monta en sus cámaras a los que consigue sacar el máximo partido.
Canon, en cambio, ha perdido su reinado entrando en la carrera de los megapíxeles, cosa innecesaria para la mayoría de los fotógrafos. Una cámara con 14 a 16 mpx es capaz de conseguir, sin pérdida de calidad, ampliaciones de gran tamaño, incluso para una pared de una vivienda o eventos tan importantes como INTUR o FITUR.



Por otra parte, el aumento de megapíxeles lleva aparejado otros problemas de muy difícil solución, si no imposible, como la difracción y la trepidación además de encarecer nuestro equipo informático por la necesidad de más almacenamiento, más memoria y ordenadores más potentes.


Todas estas reflexiones, centradas en el ámbito tecnológico, surgen de mi experiencia con estos buitres pero la auténtica vivencia de una carroñada está al margen de las herramientas.  Hoy en día contamos con fantásticas cámaras impensables hace tan sólo 10 años por lo que no tenemos disculpa para salir y conseguir buenas imágenes.
Quedan grabados en mis sentidos los graznidos de los buitres, sus violentas peleas, el tremendo olor mezcla de la carroña muerta y el que traen y airean con sus aleteos las propias aves, el polvo que levantan,...
Lo dicho, una experiencia única que una vez que se acaba ya estás deseando repetir.

© Francisco M. Martín - Imágenes Naturales

Todas las imágenes D300s con empuñadura, 200-400mm. f4 VR, trípode Gitzo 1227 y rótula Wimberley. Hide.

Por fin toqué a la zorra

Aquel día marcó un antes y un después en mi vida personal. Me encaminaba como cada jornada a mi destino fotográfico pensando en nuevas toma...